Sobre la D.

Distancia. Diferencia. Disuelto. Daño. Dual.

Sobre la D se posaron a contemplar mi acto suicida, que en paracaídas me solté desde un principio hacia un abismo, el cuál desconozco cómo, por qué o cuál fue la razón que me llevó a caer. Hondo, y lo profundo de las palabras son inmensas. Me pesan. Me sostienen y a veces me alegran el día. Nunca se está seguro, nunca lo estoy. Privatizo cada cosa que hago, la cargo de valor y nunca la suelto, me defiendo y acto seguido me pierdo en lo que hacía. En serio ¿qué hago? No solo soy yo, es mi conciencia y la tentación en disgusta observación de mis conductas.

No lo quiero, y no lo sé, pero la melancolía no es un ataque, te inunda y te absorbe, te mata, te deliria y produce lo que se llama "la doctrina de los viejos recuerdos", que en sí, sí es la melancolía. Culpable, sin embargo no existe delito. ¿Por qué entonces me vuelve así de blando? La sutil canción de lo suave, no es sino confort del éxito, de la paz, de la prosperidad, pero en este mundo la paz no es sino un mito, algo que se alcanza en la punta de la montaña más desolada y lejana, que en circunstancias diferentes, resulta imposible.

Nada es verdad, ni nadie la maneja, solo uno la encuentra dentro de su corazón.